Nuevos confinamientos y medidas restrictivas en Suramérica ante aumento de casos de COVID-19

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Países como Ecuador, Venezuela, Bolivia y Paraguay han anunciado medidas para evitar mayores contagios durante Semana Santa y ante la amenaza de las cepas brasileñas.

Pese al avance de la vacunación en Suramérica, varios países se vuelcan hacia nuevas medidas restrictivas ante el aumento de casos de coronavirus COVID-19 en la región.

Los Gobiernos de países como Ecuador, Venezuela, Bolivia y Paraguay han anunciado medidas para evitar mayores contagios durante Semana Santa y ante la amenaza de las cepas brasileñas.

Ecuador, por ejemplo, acordó cerrar las playas desde el viernes 2 de abril hasta el domingo 4, que coincide con los días feriados por la celebración religiosa.

Lo anterior se suma la decisión anunciada en días pasados por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) de limitar el movimiento de automóviles particulares entre el 1 y 4 de abril durante 12 horas, de acuerdo al último número de la placa del vehículo.

Ecuador ha registrado un incremento del 26% en los contagios entre el 7 de febrero y el 29 de marzo.

Bolivia anunció este miércoles el cierre de su frontera con Brasil durante siete días, ante el aumento de casos de COVID-19 con la variante brasileña.

“Se cierra la frontera por siete días, todas las fronteras del país con Brasil. Es una decisión del nivel central que nosotros veníamos pidiendo desde hace ya 15 días”, dijo el gerente de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud de Santa Cruz, Carlos Hurtado, en una conferencia de prensa.

Y aunque no se ha confirmado oficialmente la circulación de la cepa o casos de infectados, el Comité de Operaciones de Emergencia Municipal (COEM) de la ciudad de San Ignacio de Velazco y la Gobernación de Santa Cruz solicitaron un cierre por 15 días para evadir el colapso de hospitales por la cepa brasileña.

El país andino supera los 271 mil casos positivos (más de mil en las últimas horas) y los 12.200 fallecimientos.

Paraguay, uno de los países que por meses logró mantener controlada la pandemia, registra hoy día un colapso en su sistema sanitario. Ante la situación, el Gobierno se vio obligado a abrir desde este miércoles camas de unidades respiratorias en instalaciones militares para atender al creciente número de contagiados.

Roque Silva, director de la XI Región Sanitaria, reconoció que el país está en una situación “muy complicada”.

“Lo que habilitamos ya es una tercera línea de acción en el escenario catastrófico que ahora se nos presenta (…) Estamos en un momento muy complicado, no importa quien seas o la plata que tengas, hoy no podrás tener una cama en sala común ni en terapia intensiva”, dijo Silva durante la instalación de camas en el Comando de Institutos Militares de Enseñanza del Ejército paraguayo, ubicado en la ciudad de Roque Alonso, al noroccidente de Asunción.

Paraguay alcanza los 214 mil contagios y las 4 mil muertes.

Venezuela, entre tanto, atraviesa el pico más elevado desde que comenzó la pandemia, según el balance que dio la vicepresidenta ejecutiva Delcy Rodríguez el pasado lunes, 29 de marzo.

Rodríguez habló de los impactos de la cepa brasileña en territorio venezolano y aseguró que ha causado 1.288 casos y 12 muertes.

Además, recordó que las variantes P1 y P2 brasileñas, detectadas en Venezuela, son más transmisibles y su tasa de letalidad es más alta; y precisó que actualmente los pacientes graves suponen el 2 % de los contagios, mientras que en la primera ola eran el 1 %, señalando que las cepas brasileñas aumentan la letalidad un 100 %.

Justamente Brasil anunció este 31 de marzo la detección de una nueva variante, que puede ser la combinación de dos mutaciones presentes en la segunda ola en gran parte del mundo: la P1 de Manaos (o Amazonas) y la de Sudáfrica. informó el Gobierno del estado de Sao Paulo.

Argentina no es la excepción y tras registrar 16.056 nuevos contagios en las últimas 24 horas (situación similar a octubre pasado, durante el primer pico de la pandemia) y 124 fallecidos, el Gobierno amenaza con volver a restricciones más fuertes.

Según el balance del Ministerio de Salud, con los datos anteriores se suman en 56.858 los fallecidos y en 2.348.821 los contagios desde el inicio de la pandemia

La cartera indicó que son 3.638 los internados en unidades de terapia intensiva, con un porcentaje de ocupación de camas de adultos de 55,9% en el país y del 61,5% en la Área Metropolitana Buenos Aires. Ante el aumento de casos, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires advirtió este miércoles que luego de la Semana Santa, varios municipios bonaerenses podrían tener “restricciones adicionales”.

Por ahora, anunció la suspensión de actividades de 2 a 6 de la madrugada y el límite de hasta 10 personas para reuniones sociales en los 110 distritos que se encuentran en fase 4.

El viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, califica la situación del distrito como “muy preocupante”, pero aclara que “lo positivo” es que están “vacunando”, según la agencia estatal Télam.

Chile, por su parte, retomó las medidas restrictivas para las personas que ingresen al país con el fin de frenar el aumento de casos de COVID-19 que se ha presentado en las últimas semanas.

Desde las 5:00 a.m. (hora local) de este miércoles, todos los viajeros que lleguen a territorio chileno desde el exterior deberán cumplir una cuarentena obligatoria de 10 días, una medida que no contempla ninguna excepción.

El país que más avanza en la vacunación en la región registra 995.538 casos positivos (más de 6 mil en las últimas horas) y más de 23 mil muertos desde el inicio de la pandemia.

Fuente: Agencia de noticias Anadolu.