Las esperanzas de los “dreamers” con respecto a Biden y su temor ante los últimos meses de Gobierno de Trump

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El legado migratorio que Donald Trump deja a Estados Unidos está marcado por la persecución a los inmigrantes y por la política “cero tolerancia”, que propició la separación de cientos de niños de sus padres y de muchas familias en el país.

Después de la derrota electoral, Trump recibió otro revés. La semana pasada, un juez de la Corte del Este de New York invalidó la cancelación de DACA, programa que protege a miles de jóvenes inmigrantes, en su mayoría latinos, el cual había sido cancelado mediante una orden ejecutiva presidencial meses después de que Trump tomara posesión en la Casa Blanca.

“Pasamos tanto tiempo y años que luchamos para estar como familia juntos. Después de tanto esfuerzo, de la nada querían separar a las familias de nuevo. Fue muy difícil aceptarlo. Pensé que todo el sacrificio que había hecho se había perdido. Y que no valió nada la pena”. Así se sintió Giselle cuando se enteró de la orden presidencial con la que Trump buscaba ponerle fin al beneficio migratorio.

La joven inmigrante beneficiaria de DACA, que habló con la Agencia Anadolu, es solo una de las personas que se vio afectada por las medidas tomadas por la Administración Trump durante los últimos cuatro años.

En septiembre de 2017, tan solo ocho meses después de su juramentación, Trump emitió una quinta orden que tenía como objetivo directo cancelar el Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, DACA por sus siglas en inglés, que benefició con un amparo migratorio a 640 mil jóvenes inmigrantes, a los que se les conoce como “dreamers”.

“Gracias a DACA tengo licencia para manejar, puedo estudiar y puedo trabajar. Si me quitan esto no podré hacer nada en el país. Desde que Trump quiso cancelar el programa, yo solo seguí trabajando y guardando mi dinero porque no sabía qué iba a pasar… Nos decepcionamos mucho con mi papá”, recuerda con cierta tristeza Sofía, otra de las afectadas por la cancelación del programa, quien también habló con Anadolu.

DACA fue instaurado por el presidente Barack Obama en agosto de 2012 y estaba dirigido específicamente a menores de edad que ingresaron de manera ilegal al país. La mayoría de los beneficiarios de este programa cruzaron Centroamérica y México para reunirse con sus padres en Estados Unidos, quienes estaban en situación irregular o que ya habían obtenido algún amparo migratorio.

“En el memorándum que emitió DHS (El Departamento de Seguridad Nacional) se dijo: no más permisos, no más nuevas aplicaciones y vamos a limitar el estatus de DACA dando un permiso de un año de trabajo”, explica la abogada de migración Gina Takemori, de Takemori Law Firm, que trabaja con miles de inmigrantes en el área de Washington DC, Maryland y Virginia.

El golpe migratorio que hizo que cientos de miles de inmigrantes vivieran en la zozobra durante los últimos tres años fue muy grande.

Dos meses después de la cancelación de DACA, Trump emitió una nueva orden y canceló el Estatus de Protección Temporal, TPS por sus siglas en inglés, dejando a 250 mil inmigrantes afectados, la mayoría de los cuales eran precisamente los padres de los “dreamers”.

“Eso duele porque tú sabes cuánto uno lucha en este país para obtener sus metas. Fue una sorpresa que me partió el corazón, porque supe cuántas consecuencias venían con eso. Y lo último que quería era estar separada de mi familia de nuevo”, pensó Giselle cuando se enteró de la nueva orden, que también afectaba a su familia, pues su padre es uno de los beneficiarios del TPS.

Las opciones

Tanto la mayoría de los beneficiarios de DACA como los del TPS tienen más de 20 años de residir en Estados Unidos. De hecho, muchos jóvenes lograron entrar a la universidad y están por finalizar su carrera gracias a esta beneficio. Sus padres lograron establecer negocios que aportan a la economía del país y que ayudan a otros inmigrantes con empleo.

Para muchos regresar a sus países de orígenes no era una opción a considerar. “Yo no consideré regresar a Honduras, porque toda mi familia está aquí en Estados Unidos. Nunca quise estar alejada de ellos, esto fue una noticia muy fuerte para nuestra familia. No podíamos creerlo en el momento; nos afectó física y emocionalmente”, dice Giselle.

Otras familias, como la de Sofía, pensaban que si Trump resultaba reelecto, la persecución de los inmigrantes y la separación de las familias continuaría por cuatro años más.

“Hicimos un plan, por si Trump ganaba y nos quitaba todo. Mi papá y yo hablamos con mis hermanas nacidas aquí para saber qué podía pasar si ganaba y nos quitaba DACA y TPS. Nos teníamos que preparar con dinero o prepararnos para vivir sin el beneficio. Consideramos también irnos a El Salvador, pero iba a ser difícil, porque nuestra vida está aquí y mis hermanas nunca han estado allá. Hace 15 años que salí del país”, asiente Sofía.

De inmediato, después de la orden ejecutiva de Trump para cancelar DACA, grupos de activistas, abogados y organizaciones que trabajan con inmigrantes en el país trabajaron para establecer, junto con los “dreamers”, demandas en varios estados de la nación norteamericana. La anulación emitida por la Corte de New York es producto de una de estas demandas.

“La oposición y los grupos de derechos humanos se pusieron a trabajar y por eso empezaron estas demandas. Lo que pasó la semana pasada fue la recomendación del juez a una de estas demandas. La administración Trump en los últimos días lanzó la campaña para confirmar a Chad Wolf de inmediato después del sábado, para que sea confirmado antes del día de la inauguración”, explica Takemori.

En su intento por cancelar el programa en los primeros meses de gestión, la Administración Trump cometió un error. Chad Wolf fue nombrado secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional, pero al momento de emitir el memorándum con la orden para cancelar DACA -y hasta ahora- Wolf no había sido ratificado en el cargo ni tampoco se había hecho oficial su nombramiento.

“Dreamers”, aún en riesgo

Pese a la acción de la Corte, los “dreamers” aún no están a salvo. Trump todavía tiene hasta el 20 de enero, día en el que el presidente electo, Joe Biden, toma posesión de la presidencia, para emitir una nueva orden o para corregir el error técnico legal cometido a la hora de ordenar la cancelación de DACA.

“En el memo de julio, cuando se ordenó cancelar el programa, el problema fue que el señor Wolf no era un secretario confirmado por el Senado y no era el secretario oficial. El título de secretario interino no le permite a un funcionario cambiar políticas establecidas, o limitar a los beneficiarios las aplicaciones o limitar el programa DACA”, continuó la experta en leyes migratorias.

Esa orden con la que se canceló el programa quedó invalidada la semana pasada con la decisión del juez y, según señalan expertos en el tema migratorio, Trump está tratando de asegurar que sus órdenes ejecutivas con respecto a las políticas migratorias continúen y se mantengan.

“Aunque tenemos esta acción del juez, por ahora no hay información de USCIS (Servicio de Ciudadanía e Inmigración) aceptando nuevas aplicaciones. Tampoco tenemos información que indique que están aceptando permisos de viaje. Esto no ha terminado”, dice Takemori.

La abogada continúa: “La meta de esta Administración fue invalidar DACA, bloquear el programa, sin importar el origen y el fin del programa. Además, se fueron por todos lados tratando de despojar a los beneficiarios del programa; incrementaron las tarifas, acortaron el tiempo para el permiso a un año, con el objetivo de invalidar todo el programa, limitando la habilidad de la gente para permanecer en el programa y en el país”.

Por ahora, los “dreamers” ponen sus esperanzas en el próximo presidente, que prometió durante la campaña electoral tomar acción en los primeros días de su gestión en el tema migratorio y proteger DACA.

“Por ahora sentimos un alivio, porque uno no quiere vivir con miedo toda su vida o dudando sobre qué será lo siguiente que va a pasar. La lucha para nosotros y para muchas otras familias continúa y esta lucha es para que todos obtengan la residencia que tanto se merecen”, aseguró Giselle.

Fuente: Agencia de noticias Anadolu.