Carlos Florentín, presidente del Banco Nacional de Fomento en comunicación con Radio Nacional del Paraguay, destacó que la entidad bancaria a su cargo concedió en créditos COVID unos 485 mil millones de guaraníes, que representa unos 75 millones de dólares de los fondos de emergencia en 2985 operaciones de las casi 5 mil carpetas recepcionadas, desde la última semana de marzo hasta junio, unos días hábiles.
Manifestó que “hay unas cuantas aprobadas que todavía no se desembolsaron y tenemos pendientes unas 900 carpetas para el análisis y otras 900 que tenemos rechazadas, se mantiene esa tendencia de porcentaje”.
Explicó que dentro del análisis de créditos utilizan unos ratios, que usan todos los bancos para estudiar a las personas, desde febrero hacia atrás, no la facturación de marzo hacia adelante porque muchas de las mismas están en facturación casi cero, se mide la liquidez, el endeudamiento y muchas antes de la pandemia, ya contaban con problemas estructurales.
Indicó que miden un porcentaje de sus ingresos, cuánto estaba comprometido antes de la emergencia sanitaria y cuarentena, hay algunos que se encuentran muy endeudados, peor después de las medidas restrictivas para evitar que el coronavirus siga propagándose en el país y el BNF no puede otorgar créditos en esas condiciones, ya que tiene que proteger el patrimonio público, que pertenece el 50 % a terceros y el 50 por ciento a entidades públicas.
Aseveró que otra de las razones por las cuales no se aprueban créditos para quienes no reúnan las condiciones, es que al ser una entidad bancaria pública, hay contralores y supervisores como el Banco Central del Paraguay y la Contraloría General de la República y por eso, el BNF no puede salirse de su política, aunque hicieron todo lo que estuvo a su alcance para otorgar el beneficio a las personas que lo requirieron.