Jair Bolsonaro participó en la celebración anual sin seguir las recomendaciones de seguridad por la pandemia, que ha cobrado la vida de más de 126 mil personas en el país.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, celebró este lunes el Día de la Independencia del país en un acto que contó con la participación de todo el gabinete ministerial, altos mandos militares y al menos 500 personas.
Sin el habitual desfile militar y menos impresionante debido a la pandemia del COVID-19, el presidente brasileño saludó a los asistentes en una ceremonia que duró una media hora en el césped del Palacio de Alvorada, sede del Ejecutivo.
El mandatario también estuvo acompañado de su esposa Michelle Bolsonaro y el vicepresidente Hamilton Mourão.
Bolsonaro llegó al sitio de la ceremonia poco antes de las 10 de la mañana (hora local) en el vehículo presidencial Rolls Royce ‘Silver Wraith’, acompañado por su hija Laura, de 9 años, y otros menores, algunos sin mascarilla médica.
La celebración de la Independencia brasileña de Portugal, en septiembre de 1822, también contó con espectáculo de aviones acrobáticos de la Fuerza Aérea.
Esta vez, el presidente se limitó a observar el show aéreo, saludó a varios asistentes estrechando su mano y se tomó fotos con algunos, para luego retirarse sin dar declaraciones a los periodistas.
Como es habitual, Jair Bolsonaro, uno de los gobernantes que más ha desestimado el impacto del coronavirus y quien la ha calificado como “gripecita”, no siguió con los protocolos de bioseguridad.
Con 4.137.606 casos totales y 126.686 fallecimientos, Brasil está entre los tres países más afectados del mundo por la pandemia (el segundo con más muertos, solo superado por EEUU con 193.305 decesos).
Fuente: Agencia de noticias Anadolu.