La favorita Francia con la aguerrida Croacia con el objetivo de alzar la Copa

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El próximo domingo a las 10, hora paraguaya, las selecciones de Francia y Cracia, medirán fuerzas para llegar al único objetivo, alzar la Copa del Mundo, que se disputa en Rusia.

El equipo Les Blue, llega a su tercer final del mundo, con el ropaje de favorito, ya que tiene la chapa de campeón en 1998 y subcampeón en Alemania 2006, cuando en la tanda de penaltis, fue superada por Italia.

En ambas finales, Zinedine Zidane dio la nota, en el torneo organizado por los franceses, el capitán y estrella hizo un doblete, ambos de cabeza para derrotar 3-0 a Brasil de Ronaldo.

En el 2006, en Alemania fue negativa la participación de Zidane, pues al convertir de penalti, en tiempo de alargue, fue expulsado tras golpear al defensa italiano Marco Materazzi.

En cambio los croatas, llegan a su primera final del mundo, de la mano de sus estrellas Luka Modric y Mario Mandzukic, quienes llevan el equipo al hombro y contagian las ganas, a pesar de la adversidad en el partido. Eso lo demostraron en los octavos de final, frente a Dinamarca, cuando iniciaron en desventaja y lograron la victoria en la tanda de penaltis.

La misma realidad lo vivieron en el partido frente a Inglaterra, que nuevamente comenzaron en desventaja a los cinco minutos de juego.

Iván Rakitic, puso el pie para igualar en el marcador y dar el toque de esperanzan para luego pasar al frente y derrotar a Inglaterra y sellar el paso a la final frente a Francia.

Luego de 20 años, ambas selecciones se enfrentan, pues en 1998, Francia derrotó a Croacia 2-1.

En aquel mundial, las estrellas de los dos conjuntos brillaron, Zidanine Zidane, fue el héroe en la final y Davor Suker, se anotó como el máximo artillero de la competencia mundial.

Los franceses esperan las genialidades de Antony Griezmann, la velocidad y precisión én la definición de Kylian Mbappé, el sorpresivo golpe de cabeza de Samuel Umtiti y las gambetas mortíferas de Paul Pogba.

La final se disputará en el estadio Luzhnikí Moscú.